jueves, 22 de diciembre de 2011

La publicidad y su influencia.

Hasta ahora, habíamos hablado de lo que eran los estereotipos, los clichés, como a través de ellos se manifiestan las diferencias de género en muchos y diferentes ámbitos de la vida como puedan ser los juguetes o los trabajos. Pero no debemos olvidarnos de mencionar la importante influencia que ejercen sobre nosotros desde la publicidad.
Aquellos juguetes más propios supuestamente de un género que de otro que manifesté en mi anterior entrada, puede observarse a simple vista como en los anuncios de la televisión, aparecen niños anunciando estos juguetes más masculinos, mientras que son las niñas las que aparecen en los anuncios de muñecas y comiditas. También son las mujeres las que aparecen anunciando productos del cuidado del hogar, como los detergentes, suavizantes, limpiasuelos,etc.
Y, ¿quiénes son los que nos hacen visualizar las mujeres más bellas del mundo? Los anuncios de perfumes, de ropa y también aquellos anuncios que van dirigidos al público masculino y que para ellos no haya nada más atrayente que una mujer guapa y sexy. Aquí tenemos un ejemplo de anuncio masculino de estas características.
Pero la publicidad no se limita solo a lanzarnos estereotipos de género, también nos inculca valores, formas de comportamiento y actitudes que van asociados a un tipo de persona, o estrato social o incluso a la edad. En los anuncios, en los que aparecen adolescentes, estos se muestran desafiantes, divertidos, dinámicos, guapos y muy superficiales. Y la parte ficticia de la publicidad se vuelve real, pues los adolescentes siempre han sido muy influenciables a cualquier tipo de moda social, pues siempre intentan encajar en un grupo de iguales y necesitan sentirse aceptados por los demás, así que asumen esta imagen estereotipada de sí mismos y la llevan a la realidad. La peor parte de esta realidad, se da cuando estos estereotipos desencadenan en los jóvenes problemas psicológicos, entre ellos, los de alimentación, tales como la anorexia o la bulimia, y cabe destacar la vigorexia pero más asociada a la obsesión por la musculatura del cuerpo. Todos estos problemas se deben a una visión distorsionada del propio cuerpo, y qué decir que la importancia que los anuncios publicitarios mantienen sobre el culto al cuerpo físico, no ayuda en la mentalidad de este estrato de la sociedad.
La verdad, es que este tema de la publicidad y su influencia en la sociedad abarcaría infinidad de temas que aquí no hemos tocado, creo que muchos más de los que lleguemos a imaginar cualquiera de nosotros. Pero la reflexión que quiero que tengamos, es que debemos ser quienes somos, con nuestros defectos y virtudes, y no que la televisión u otros medios nos limiten nuestra personalidad, nuestra manera de actuar y de pensar, porque no somos robots controlados por alguien, somos personas con capacidad para razonar y pensar por nosotros mismos, y si así lo hacemos será la mejor forma de hacernos valer y querernos tal y como somos.

2 comentarios:

  1. Una publicidad llamativa ya dejo de ser la que demostraba ser mejor su producto al de los demas con sus atributos reales, sino que como se ve en el video, ahora todo se exagera hasta tal punto que parece hasta pesado o bromas de mal gusto. Yo no quiero ni pensar que tipos de anuncios harian las industrias tabaqueras con su imagen de hombres duros y bravos o triunfadores empresarios con su puro, si no se hubieran prohibido.

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  2. cierto, ahora ya no se vende un poducto por sus características reales, sino por lo que no es, por lo que realmente no puede darte, como en este caso era un montón de mujeres.¿Qué nos ha pasado para que hagamos caso de esta publicidad tan tonta? Supongo que solo busca llamar la atención de una forma obvia.

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